Me refiero a ese "sentido arácnido" que nos advierte antes de que ni siquiera hayamos procesado lo que está sucediendo o incluso antes de que tengamos toda la información necesaria para poder entender de qué se trata.
Todos lo tenemos casi de nacimiento, diría yo, pero no todos hacemos el mismo uso de él ni lo desarrollamos de la misma forma, es evidente.
Yo lo utilizo mucho, hay incluso quien me diría que puedo llegar a ser impulsivo, aunque no creo que sean la misma cosa, los impulsos vienen sin más, carentes de una explicación, pero cuando es el instinto el que interviene las decisiones tienen un trasfondo, una base fruto principalmente de la experiencia acumulada, y ahí es donde reside su mayor poder.
Nos permite tomar decisiones de forma rápida, eficaz y si se trabaja lo suficiente, acertadas en un alto porcentaje de los casos. Es como un círculo vicioso, cuanto más se usa, mayor es su poder y más embriagadora es la sensación de satisfacción al decidir, porque seamos sinceros, tomar decisiones es una de las cosas más difíciles que hacemos y lo hacemos continuamente.
¿Por qué no aprovechar entonces esta herramienta llamada instinto? ¿Por qué no entrenarla, afilarla y sacarla a relucir en cada ocasión que se nos presente?
Cuando comentas algo así con otra persona, por norma general el interlocutor apela a la necesidad de tomar decisiones más racionales en favor de las instintivas, pero no creo que sean mutuamente excluyentes, es posible aprender a usar cada cosa en su debido momento.
Por si eso fuera poco, actuar por instinto genera autoconfianza y refuerza la seguridad en uno mismo. Te permite enfilar los problemas por complejos que sean y despacharlos sin vacilar ni advertir el más mínimo atisbo de duda.
¿Y por qué cuentas todo este rollo ahora, Juanma? pues es fácil: porque no me invade el temor, simplemente soy más consciente de todo cuanto me rodea, percibo muchos detalles que antes no podía ver o que en un primer vistazo pasaban desapercibidos, noto perfectamente como barreras que antes me parecían imposibles de traspasar, ahora se abren sólo con mi paso, los límites se disipan y todo aquello que parecía imposible de repente parece alcanzable.
Lo mejor de todo, es que estas sensaciones viven ya tan arraigadas en mi interior, que casi no ocupan espacio en mi mente, dejando lugar para que otras nuevas lleguen para quedarse. Es mi parte más primitiva la que evoluciona, mi ser más básico, mi yo más fuerte, seguro y poderoso. Todo cuanto espero es que este instinto básico, me siga guiando por tan maravilloso camino ;)